Edgardo Nieva, el actor que interpretó en la película de Leonardo Favio Gatica, el Mono el reconocido boxeador, murió a los 69 años tras haber sufrido durante el último tiempo de un cáncer.
La Asociación Argentina de Actores confirmó en su cuenta de Twitter que el intérprete estaba internado en el Instituto Favaloro, donde murió. “Lamentamos el fallecimiento del actor Edgardo Nieva. En su destacada trayectoria realizó trabajos en cine, teatro y televisión. Afiliado desde 1975, siempre estuvo presente y comprometido con su sindicato. Nuestras sentidas condolencias a sus familiares y amistades”, tuiteó la entidad.
También la cuenta del Teatro Multitabaris le dedicó un mensaje. “Desde esta casa teatral despedimos con los mejores recuerdos de nuestro diálogo permanente al amigo Edgardo Nieva, un actor luchador y consecuente”, recordaron en esa red social.
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El actor, de 69 años, fue largamente reconocido por su trabajo en el film de 1993 Gatica, el Mono, al que llegó luego de haber luchado por hacerse un lugar en la profesión. También tuvo una larga actividad en otras producciones cinematográficas, obras de teatro y programas de televisión.
En la película de Favio, su fuerte estuvo en la sensibilidad que le imprimió al personaje, además de su parecido físico. La recordada obra del cineasta recorre la vida del reconocido boxeador, desde que era un desconocido, hasta su apogeo en el deporte, la fama que consiguió y su muerte.
A nivel teatral, Nieva participó a lo largo de su carrera en obras como La Demolición, Orquesta de Señoritas, La empresa perdona un momento de locura, Muero por ella, Esquirlas, Un tranvía llamado deseo, El nuevo mundo y El dragón de fuego, entre otras puestas en escena.
En cine y además de su debut de la mano del director Leonardo Favio, también su lució en películas como La dama regresa, de Jorge Polaco; Expediente Santiso, de Brian Maya; Palermo Hollywood, de Eduardo Pinto; Tesoro mío, de Sergio Bellotti; y Ni vivo ni muerto, de Víctor Jorge Ruiz.
La labor televisiva de Nieva no fue tan extendida como su paso por el cine y el teatro, pero también dejó algunos trabajos con su marca, en la que se resaltaban los personajes pasionales y con determinación. Así pasó por Sin condena, Mozo hay un físico en mi sopa, El Lobista y Sandro de América, la serie en la que se mostró la vida del cantante y que fue una de sus últimas participaciones conocidas.
